El concepto del Katechón otorga legitimidad al poder político

León III en 800 coronó en la basílica de San Pedro del Vaticano a Carlomagno como imperator romanorum semper augustus. Se trasladó así la dignidad imperial romana de Cosntantinopla, segunda Roma, a la católica Aquisgrán, tercera Roma. Tiene lugar una translatio imperii de los bizantinos a los francos. Renueva efectivamente un Imperio que no dejó virtualmente de existir. El nuevo Imperio Santo hereda el legado teológico político de los emperadores romanos pero además hereda la teología cristiana centrada en el Apocalipsis. El Emperador tiene una
responsabilidad escatológica. El Imperio no sólo es romano, es cristiano. En El nomos de la tierra, Carl Schmitt defendió la tesis de que el concepto decisivo que funda la continuidad del Imperio Romano es el de katechón, a fin de cuentas, dice Schmitt, todos los conceptos políticos son conceptos teológicos secularizados. El imperio este katechón se expresaba políticamente de acuerdo con una misión transhistórica que dotaba al imperio de una carga histórica y de una dimensión metapolítica.

Giménez Pérez, F. (2024). Notas sobre el concepto de Imperio.

Revista MetábasisNº 17, p. 67.

revistametabasis.com

ISSN 2605-3489

Deja un comentario